Ya era hora que Silicon Valley y sus ricas empresas reaccionaran de forma tajante y dura frente a TRUMP y todas sus decisiones estrambóticas, racistas, sexistas y egoístas. Pasar unos días en la cuna de la tecnología me ha permitido tener una idea más clara de lo que pasa en estas tierras y de como TRUMP está cambiando ……a mal, Estados Unidos. Una democracia, la del país más importante del mundo, que está cada día más dividida. Una sociedad cada día más desigual.
Los gigantes tecnológicos dueños de las plataformas más importantes de Internet y sus directivos, desde siempre se han mostrado tibios en sus reacciones frente a un sin fin de problemas relacionados con los derechos humanos y especialmente el racismo y la tolerancia. Detrás de una mal usada y entendida idea de objetividad y libertad corporativa han preferido siempre no tener un papel activo, no arriesgar su posición económica con opiniones en temas calientes . Pero Trump y Charlottesville parece que han roto la paciencia de los que dirigen nuestra vida en las redes con internet.
La falta de contundencia en rechazar los grupos supremacistas blancos por parte del Donald Trump en una conferencia en Nueva York ha, de forma clara y espero definitiva, despertado el sentido común y la responsabilidad de estos multimillonarios corporativos que nunca hubieran querido enfrentarse al líder tuitero. El considerar que estos NEO nazis son equiparables a los antifascistas e igualmente criticables, ha sido una patada a la paciencia de quien ha querido ponerse un antifaz frente a las tonterías del Presidente americano. Por fin han entendido que por un lado tenemos NEO NAZIS y por el otro están los demás, personas de diferentes ideologías, que piensan de forma diferente, pero personas que no usan el ODIO, LA INTOLERANCIA, LA VIOLENCIA para reafirmar una superioridad que existe solo en las mentes enfermizas de estos RACISTAS.
Al menos ocho de los 28 directivos que integran el consejo industrial creado por TRUMP han anunciado su dimisión en protesta por la reacción equidistante de Trump a la violencia en Charlottesville. El primero fue el consejero delegado de Intel, Brain Krzanich seguido por los demás. No es la primera vez que ocurre. Ya Elon Musk, numero uno de Tesla, ya lo hizo cuando Trump decidió que el país abandonaría los acuerdos de París contra el cambio climático. Después también los mandamás de Google, Twitter, PayPal y casi de forma unánime todas las grandes corporaciones de Silicon Valley se han posicionado en contra de las palabras de un Trump que se va quedando cada día más solo en un país que es cada vez más racista y menos solidario.
Lo digo de forma tan clara y contundente porqué las calles de San Francisco hablan claro. Si hay una palabra que define esta ciudad y la América de hoy es: desigualdad. Una desigualdad que se respira en las calles, se vive en las casas, se huele en cada respiración de una ciudad donde más de siete mil sin techo viven sin ningún tipo de protección social. Y lo único que te dicen los adinerados dueños de hoteles y los medios de comunicación es que esos ‘muertes vivientes’ no son peligrosos, no hacen daño, no pasa nada.
Una imagen tremenda que merece respuestas que no parecen puedan llegar. Con la falta de respuesta al asesinado nazista de Charlottesville, TRUMP parece haber roto los muros de omertá que las corporaciones habían construido para defenderse de forma cobarde. Desde muchos lados se pide impeachment contra TRUMP que parece estar cada día más solo.
Charlottesville parece haberlo ha cambiado todo. El morado fue el color elegido para despedir a Heather porqué era el color favorito por la joven de 32 años asesinada el sábado pasado por James Fields, criminal NEO NAZI. Susan Bro, madre de Heather, rodeada de decenas de amigos, vecinos y políticos llorando pronunció unas palabras que espero retumbaran en la hueca cabeza de TRUMP: ‘Intentaron matar a mi niña para acallarla….¿Pues saben que? La han amplificado’
¡Que así sea! Silicon Valley y todas las corporaciones tecnológica que de alguna forma han cambiado y seguirán cambiando nuestras vidas no pueden tener un papel pasivo frente a los problemas sociales. Tienen en sus manos mucho poder y tienen que trabajar y luchar por una sociedad más justa y donde EQUIDAD y SOLIDARIDAD sean las palabras claves. NO solo el dinero.