EUPREPIO PADULA

Este blog es para dar mi opinión sobre hechos relevantes de la actualidad, especialmente política y para hablar del liderazgo, falta de liderazgo y a menudo, anti-liderazgo de los poderosos que dirigen, manipulan y organizan nuestras vidas. Lo hacen en mucho casos de forma horrible, corrupta, lamentable y a menudo nos avergüenzan por su falta de responsabilidad y dignidad. El terrible lodazal en el cual han llevado la clase política con sus apestados casos de corrupción quitan el respiro a una sociedad ya de por si muy complicada y encarcelada entre los falsos mitos de la modernidad capitalista. Sociedad anestesiada frente al dolor ajeno y cobardemente ausente de las cosas que verdaderamente importan.

Hace ya casi un año falleció mi madre. Y en este día tan señalado, el día de la Madre, por cosas raras que pasan en la cabeza y en el corazón, de repente me he levantado muy triste por no tenerla a mi lado y tremendamente cabreado por comentar día si y otro también la basura moral en la cual muchos ineptos morales nos obligan a navegar y en mi caso a compartir opiniones. Por no olvidar el resto de noticias que entre violaciones, guerras, ataques terroristas y todo tipo de masacre criminal a los derechos humanos, la paridad, la tolerancia y un largo etcéteras de crímenes y abusos, amargan nuestro día.
Ya se que es muy difícil entender que me ponga a hablar de ello justo hoy. Pero, lo dicho, las neuronas y el corazón, a veces siguen caminos y emociones que van ‘a su bola’ sin entender de racionalidad y lógica.

¡Mi madre lo era todo para mi!

Ella lo sabía y siempre, hasta al último segundo de su vida estuvo a mi lado mimándome. Su generosidad fue tan infinita que dejó de respirar después de escuchar por más de una hora mis lagrimas, mi dolor por verla sufrir, mi egoísmo por no aguantar más tanta pena, mi desesperado abrazo para dejarse ir y descansar. Se dejó morir para no seguir machacando mi corazón y mi debilidad. Cuando cerró los ojos, yo acostado a su lado, sentí un escalofrío brutal y un tremendo cocktail mental de serenidad y terror, miedo infinito a su ausencia.
No hay persona en este universo que haya sido capaz de amar de una forma tan total, tan infinita, tan inmensa como ella. Y no me refiero solo al amor por sus hijos, me refiero al AMOR, a la generosidad, a la solidaridad con la vida y a todos los que la rodeaban. Analfabeta pero tremendamente universal y tolerante, pobre y sin casi recursos económicos pero infinitamente rica de energía vital, supo hacer de nosotros unas personas sanas y especialmente regalarnos su inmensa sonrisa…¡SIEMPRE!. Ha sido la persona más bondadosa y valiente del mundo. Un mar de sonrisas y de energía positiva para todos los que querían estar a su lado, aunque sea por un momento. Su tsunami de fuerza era tan contagioso como su alegría y ganas de vivir. En compartir con los demás encontraba el sentido a su vida, y daba sentido a la de los demás.
En cada momento se hico cargo de mis lagrimas y heridas con sus abrazos, curando con los besos las penas, llenando de caricias cada rasguño, curando con su vida cada momento de tristeza.
Mi Madre, fue mi maestra, mi niñera, y por encima de todo me enseñó a ser buena gente y a no buscar nunca dinero y poder. Sabía que me sentía un marciano en esa casa y pueblo tan pobres de oportunidades, pero supo inyectar en mi ADN la importancia de sentirme siempre fiel a sus, nuestros valores y a los sentimientos que hacen eterno el amor para las cosas sencillas y los afectos verdaderos.

Hoy más que nunca me acuerdo de las palabras de mi madre cada vez que ocurría alguna desgracia, como ella llamaba todo el ‘mal’. -Pobre Madre- me decía llorando. Hoy más que nunca me pongo en la piel de las madres de todos los corruptos, los criminales, los que usan y abusan de su vida para torturar, matar, violar, robar joder la vida de los demás. Y en esa piel tan arrugada, tan destrozada de heridas sin curación, me siento afortunado y siento pena por ellas. Seguro que muchas madres han tenido alguna culpa en el desarrollo criminal de sus hijos, mira la actitud de la madre del ultra del Betis que hace poco desató su mente psicopática contra un pobre gallego, sin embargo muchas otras habrán sido madres maravillosas como la mía.
Tiene que ser desgarrador ver un hijo entre rejas, en la cárcel sabiendo que ha matado, robado, que es un corrupto, un terrorista, un violador. Supongo que para ellas es como una pesadilla, de la cual nunca se despertarán. De la mirada de odio de los familiares y amigos de los que han sido víctimas de sus hijos, nunca podrán liberarse, como tampoco de un tremendo sentido de culpa. Hoy, día de la madre, lloro por no tener al lado ‘María, la santivitese’…¡de San Vito! Así la llamaba todo el mundo por el pueblo donde había nacido mi madre. Pero lloro también por todas esas Madres víctimas de las acciones criminales de sus hijos.

EUPREPIO PADULA