THERESA MAY YA ES REINA DE LA POSTVERDAD
EUPREPIO PADULA
Desde hoy Theresa May pasa alargar la ya infinita cola de políticos ‘Pinochos’ o paladines de la postverdad. Lo había reiterado hasta la saciedad. Las elecciones serían cuando tocaran, es decir en 2020. Pero ya se sabe que la palabra de algunos políticos tiene la vigencia de un café… de lo que se tarda en tomarlo. El anuncio de un anticipo electoral ha sido una ‘sorpresa’… ‘ma non troppo’.
No hacía falta ser muy avispado para sospecharlo. Los indicios, estaban a la vista. Reiteradas y enfáticas negativas de un adelanto, necesidad de un respaldo fuerte para ‘atarse los machos’ ante una negociación con Bruselas que será dura y difícil… y el viento de cola electoral y un partido laborista hecho unos zorros. Cójanse los últimos sondeos, si aún conservan dudas. Casi seis puntos más a favor de los conservadores. Cuatro menos para los laboristas. Sustancial mejoría para los liberales ( dudosos como socios futuros, a diferencia del pasado, puesto que son claramente europeístas) y recorte de expectatvas para los ultras de UKIP. La foto, qué duda cabe, ‘pinta’ muy bien para Theresa May. Estas expectativas de puntos además, no es baladí el dato, se transforman en un crecimiento exponencial en escaños, debido al sistema electoral británico, que premia extraordinariamente las mayorías y castiga con dureza a los minoritarios. Theresa May sabe muy bien que para poder afianzar su liderazgo tiene que demoler las barreras internas a su partido que todavía está muy repleto de diputados europeistas que como Cameron se hicieron un harakiri al poner en marcha ese desastroso referéndum que sirvió para que Reino Unido votara SI al Brexit y de paso para que Cameron ganara el Nobel a la estupidez política.
La decisión de May ha tenido la virtualidad de provocar una conmoción en todas las fuerzas de la oposición. De geometría variable, claro está.
En los laboristas, nervios y ansiedad. Los sondeos son implacables con el partido de Corbyn y reducen a la mínima expresión sus actuales 229 diputados. Algunos se van a tirar del tren en macha. Otros no lo confiesan abiertamente, pero lo piensan. Su líder asegura, en público y en privado, que está muy tranquilo. Pero la decisión de la primera ministra, sencillamente, le ha descolocado. Sabe que buena parte de su cuerpo electoral le dará la espalda y girará hacia los liberales que capitanea Tim Barron. Y que, a cambio, no recibirá un solo voto de los desafectos al partido gobernante, por muy proeuropeístas que estos sean.
Y es que, los liberales, serán sin duda, junto con los conservadores, los más beneficiados por este inesperado regalo.
Su menaje será unidireccional, machacante.., pero seguramente eficaz. Si quieres mantener al Reino Unido en la Union, si quieres evitar una mayoría absoluta conservadora que conducirá al país al desastre, vota centro, vota liberal. Calará, ya se verá. En el fondo se trata de presentarse ante los votantes como los únicos que no pelean por una elección sino por algo mucho más importante: la vuelta de su país al redil europeo. Garantía de futuro, no para cuatro o cnco años, sino para décadas. Muchos gestores de la City, a os que no les llega la camisa al cuerpo desde hace meses, se lo agradecerán. Muchos ciudadanos sensatos, progresistas pero también conservadores, que votaron ‘no’ al ‘Brexit’, también.
Los liberales no habían levantado cabeza desde el fiasco electoral con el fueron castigados tras su experiencia de coalición de 2010 con David Cameron y esta puede ser su gran oportunidad. De los ocho exiguos representantes con los que cuentan en la actualidad, podrían pasar a frisar los 60 parlamentarios. Ellos lo saben y sacan pecho.
Dicen que, en la primera hora y media tras el anuncio de May, registraron de golpe 1.500 nuevos afiliados. A media tarde, ya eran 4.000. Lo datos son suyos claro. Pero son verosímiles.
Para añadir más significado a este anuncio tan inesperado hay que añadir el feo que Theresa May hace a España. La fecha elegida, ¡Que casualidad! ¡O no! Es el 8 de junio y justamente coincide con la prevista por el viaje de estado de los Reyes de España al Reino Unido. Ni unas semana ante ni después. No creo a las casualidades y esta decisión no puede significar otra cosa que la visita de los Reyes se cancela.
EUPREPIO PADULA